El juez instructor del caso Alvia decidirá si era obligatorio analizar el peligro de la curva

El juez Andrés Lago Louro, que instruye la causa por el accidente del Alvia que ocasionó 80 muertos y más de 100 heridos en julio de 2013 en Angrois, tomó declaración a los dos peritos de QBE, la aseguradora de Renfe. Frans Heijnen y James Robert Catmur sostienen que el riesgo en la curva de A Grandeira no era tolerable. También declaró el catedrático de la Universidad de Cantabria Enrique Castillo Ron, que elaboró varios informes por encargo del perito judicial Juan Carlos Carballeira, ingeniero de caminos, y que entiende que el nivel de peligro en la línea era razonable.
La investigación trata de esclarecer si, además del despiste del conductor que circulaba con un exceso de velocidad, hay otros responsables en la tragedia. El descarrilamiento del convoy se produjo hace tres años en un punto de la línea Ourense-Santiago en el que, por cambios en el proyecto inicial, no estaba implantado el ERTMS, instalado en la red de alta velocidad. Tampoco estaba activo este sistema de control en su modalidad embarcada, debido a que el 'software' generaba fallos y los encargados de la seguridad aprobaron su desconexión.
R.