El Valedor do Pobo dice que la siniestralidad viaria es un problema económico y no de competencias

El Valedor do Pobo, Benigno López, aseguró que la alta siniestralidad que registra Galicia, y que se mantiene a pesar de la entrada en vigor del carné por puntos en julio de 2006, se debe a "un problema de inversión" en la red viaria y destacó que en la actualidad "no influye" qué Administración tiene las competencias de tráfico. En la rueda de prensa de presentación del informe A seguridade viaria en Galiza, el valedor abogó por materializar un pacto gallego por la seguridad viaria y recomendó reforzar la inversión en las carreteras gallegas, incrementar el número de agentes de tráfico y colocar radares en los puntos negros, además de incluir la educación vial en el currículo escolar.


Aunque no existe una "cuantificación real" de la inversión necesaria en la red viaria de Galicia, el valedor afirmó que Galicia se sitúa "en una posición desfavorecida" y "peor" que la media estatal. El informe del valedor incide en la escasa inversión en conservación de las carreteras gallegas. Así, datos de 2003 colocan a Galicia como la cuarta comunidad por extensión de su red y la sexta que menos invierte proporcionalmente en ella. Recuerda que en 2004 las tres administraciones gallegas realizaron un esfuerzo presupuestario mayor, con un aumento de 100 millones para construcción de carreteras, gastando la Xunta 78,5 millones de más que en 2003 y las diputaciones subieron en 11 millones más sus partidas. Sin embargo, en conservación, según precisa el informe, "se produjo un recorte de más de 20 millones de euros, prácticamente todos a cargo de la Xunta, que redujo a la mitad la cantidad dedicada el año anterior". En conjunto, se estima en 285,7 millones de euros la cantidad "necesaria" para las diferentes necesidades de conservación de la red viaria gallega, mientras que para la red estatal se calcula en 88,7 millones y para la autonómica en 197 millones.

El informe del Valedor do Pobo sobre seguridad viaria apunta la climatología y orografía como factores que intervienen en el problema de la seguridad viaria, a lo que añade la realidad comarcal "que obliga a desplazamientos frecuentes" en una red viaria "inadaptada" a las exigencias del tráfico. El envejecimiento de la población también se traslada como factor destacado en el caso de atropellos de viandantes y, según añadió López, "no se pensó en la seguridad vial" de los peatones. Otras causas que inciden en la siniestralidad de Galicia, según el informe, se refiere a la irrupción de animales en las carreteras; la combinación de alcohol, juventud y velocidad, sobre todo los fines de semana; así como los peligros de travesías que atraviesan poblaciones.

También comentó la influencia de la que denominó "auténtica cultura de la velocidad", determinante en algunos siniestros de tráfico. "La gravedad de los accidentes aumenta cuando el exceso de velocidad está presente", matiza el informe. En esta línea, López aludió a las carreras ilegales celebradas en Galicia en lugares de acceso público. A este respecto, el informe recuerda que estos actos "irresponsables" ocasionaron víctimas mortales y apunta como ejemplo que un joven de Burela (Lugo) fue condenado por una jueza de Lugo a dos años de cárcel y privación del derecho de conducir, tras disputar en agosto de 2003 una carrera ilegal, con una chica que falleció como consecuencia de un accidente durante la competición.

Preguntado por la transferencia de las competencias de tráfico a la Xunta, Benigno López aclaró que a él no le compete entrar en esa cuestión y señaló que se trata de un "tema político" que se debe debatir "en otros estamentos, principalmente políticos". "No creo que influya en la actualidad que las competencias residan en el Gobierno central o en el autonómico", aseveró el valedor, contradiciendo las conclusiones del informe, atribuido a su predecesor José Ramón Vázquez Sandes, en el que se recoge que "las competencias que Galicia tiene en materias que afectan a la seguridad viaria ganarían en coherencia si se sumase la transferencia de tráfico". Sobre este aspecto, López recordó que hay otras comunidades autónomas que tienen transferidas las competencias, Cataluña y País Vasco, "y no provocó ningún conflicto". En esta línea, este informe presentado hoy a la presidenta del Parlamento, Dolores Villarino, precisa que "habría que descartar la existencia de problemas de tipo político para esta decisión".

El valedor se refirió a la recomendación de la Organización Mundial de la Salud (OMS), recogida en el informe, sobre que "los conocimientos locales deben orientar las políticas locales", que considera un "argumento a favor de la integración de las competencias sobre tráfico con el resto de materias que inciden sobre la seguridad viaria", como las de educación, sanidad, transporte de vehículos, infraestructuras y protección civil, que ostenta Galicia.

El ministro de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, rechazó la transferencia a Galicia de las competencias sobre tráfico y seguridad vial, ante lo cual el vicepresidente de la Xunta, Anxo Quintana, anunció en el Debate sobre el Estado de la Autonomía que presentará una proposición de ley para reclamar al Estado este traspaso competencial. No obstante, en el debate de política general se aprobó por unanimidad una propuesta de resolución para reclamar al Estado más competencias, pero no figuraba la de tráfico.


El informe del Valedor do Pobo recomienda, además, "el compromiso de obligatoriedad de realizar una auditoría de seguridad desde la planificación hasta la entrada en servicio de las vías" e incide en la necesidad de sustituir los elementos de seguridad de las carreteras para "evitar" muertes o mutilaciones de los motoristas. Con esta auditoría de las carreteras gallegas se pretende determinar "la falta de conservación de la señalización, la deficiente iluminación, el mal estado del firme y de las aceras, o la nula protección de los pasos de peatones" como condicionantes de la situación. Por ello, el Valedor do Pobo solicita a la Administración central y autonómica que realice una mayor inversión en la conservación de las carreteras gallegas. "Todo requeriría una mayor inversión para la reparación de la red viaria de Galicia", sentenció López. Con todo, López trasladó el "balance preocupante" de siniestralidad y recordó que hasta septiembre de 2007 fallecieron 216 personas en 195 accidentes mortales registrados en Galicia, lo que supone un aumento del 4,3% en número de siniestros y del 3,8% de muertos con respecto al mismo periodo del año pasado. En todo 2006 murieron 264 personas en 239 siniestros.