El presidente de la Xunta apuesta por pasar página y pide consenso para el proyecto de la Ciudad de la Cultura que considera irreversible

El actual presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, reconoció que la Cidade da Cultura (CdC) "nació mal" pero aseguró que ahora hay "un proyecto de Galicia", que cuenta con el "apoyo" del Gobierno central y para el cual aspira que lleguen fondos estatales. Así, no dudó de que esta infraestructura, con sus usos ya redefinidos, será "rentable y útil" para la Comunidad gallega, por lo que instó a "pasar página" bajo el "consenso" político y social. Touriño cerró el proceso de 33 comparecencias en la Comisión de Investigación sobre la totalidad de actuaciones públicas referidas a la Cidade da Cultura y, tras agradecer el trabajo de este órgano, consideró que llegó el momento de "cerrar una etapa y no volver a discutir", una vez que opinó que se puede "aportar luz" sobre el proyecto y "sacar conclusiones positivas".

Opinó que el informe del Consello de Contas hacía "prácticamente inevitable" la constitución de la comisión parlamentaria y resaltó que existe material "más que suficiente" para emitir "unas conclusiones adecuadas". Para el actual presidente de la Xunta, existe "acuerdo" en que el Gaiás se debe "llevar adelante" y defendió el proceso de "reconducción integral" iniciado por su Gobierno para dotar de "planificación y viabilidad económica" a un proyecto que presentaba "importantes carencias". Touriño expuso que el bipartito afrontó lo previsto en el acuerdo entre PSdeG y BNG sobre la "revisión del proyecto de la Cidade da Cultura para que sirva a las necesidades más urgentes con criterios de sostenibilidad económica y rentabilidad social y cultural". "Dar marcha atrás a las obras habría sido un despilfarro y una decisión antieconómica", aseveró. Por ello, estimó que el complejo que se construye en el Monte Gaiás es "irreversible" y defendió que su Gobierno en estos años "encarriló" el proyecto.

Recordó los usos decididos por la actual Xunta que agrupan bajo criterios temáticos la Biblioteca Nacional y el Arquivo Nacional, el Centro de Investigación do Patrimonio y el Museo de Galicia, y al Centro Internacional de Arte (CAI), el Centro de Enlace Cultural Europa-Latinoamérica, Museo dos Nenos y Escenario Obradoiro. Afirmó que son contenidos "variados, marcados por la calidad, por la innovación y por la adaptación de su oferta programática a una gama muy amplia de públicos". Touriño aseguró que la CdC es "un proyecto gallego", al tiempo que recordó que Galicia "es una institución de Estado". Por ello, justificó que se presente como "un proyecto de país y de Estado", que insistió, está "creado y pensado en Galicia y en gallego, pero apoyado por el Gobierno de España". Destacó que la colaboración entre Xunta y Gobierno central surge "de la confianza mutua y del respeto", al tiempo que reconoció la "aspiración" de que el Centro de Investigación do Patrimonio y el Centro de Enlace cuenten "con aportaciones financieras del Estado". No obstante, aunque fue preguntado al respecto por el portavoz del PP, Manuel Ruiz Rivas, el mandatario gallego no concretó qué cantidades se recibirán ni las que se han solicitado.

En relación con el modelo de gestión de la CdC, Touriño aseguró que se buscará "una gestión flexible, eficiente y ágil", al tiempo que recordó que la Xunta espera que el CAI, el Museo dos Nenos, el Museo da Historia y el Escenario Obradoiro "sean generadores de ingresos", mientras que la Biblioteca Nacional y el Arquivo Nacional serán "servicios públicos" que dependerán de los presupuestos autonómicos.

El jefe del Ejecutivo gallego aprovechó también para señalar que la CdC se ha convertido en "un proyecto estratégico" que forma parte de un conjunto de iniciativas en marcha en Galicia, entre las que destacó el pleno funcionamiento del tren de alta velocidad en 2012, el mismo año en el que estará operativo todo el complejo del Gaiás, aunque en 2009 estarán abiertos cuatro de los seis edificios -todos menos el CAI y el Escenario Obradoiro-.
"Estamos en el mismo barco", apeló a la sociedad y a las fuerzas políticas para defender que hay que "remar en el mismo sentido" y hacer que "un proyecto que nació mal" se convierta "entre todos" en "algo positivo". Touriño invitó a "pasar página", a partir de las conclusiones de la comisión, y confirmó que su gobierno está cumpliendo la "obligación" de "enderezar" el proyecto.

A raíz de lo expuesto en su día en la comisión por el ex presidente Manuel Fraga en relación a la concepción del proyecto, Touriño reconoció hoy que "los sueños forman parte de la acción de políticos ambiciosos", pero puntualizó que "deben ser sueños compartidos, porque si no, se corre el riesgo de caer en caprichos". "La Cidade da Cultura debió nacer del consenso político, del rigor y de la transparencia", expuso, al tiempo que estimó que la comisión de investigación "aportará luces y eliminará incertezas" con el fin de "construir futuro en positivo". En este contexto, Touriño volvió a reivindicar el "consenso" para un proyecto que considera que tiene "muchas fortalezas" y que conllevará "repercusiones económicas muy importantes", tanto en el ámbito cultural como en el turístico, pero que será también un "potente instrumento de dinamización interna de Galicia y de externalización de la cultura gallega".
Para Touriño, "llegó la hora de la unidad". "Independientemente de que a unos guste más y a otros les guste menos es hora de que rememos todos en la misma dirección", proclamó al rechazar los "partidismos". Defendió la "capacidad" de Galicia de poner en marcha un proyecto como este, que definió como "un reto" que no duda de que se afrontará con "éxito" y será "útil a Galicia y a sus intereses", lo que fue recibido con aplausos de los diputados socialistas.

Manuel Ruiz Rivas (PPdeG) aseguró que su grupo "recoge ese consenso" ofrecido por el presidente de la Xunta, pero instó al bipartito a que "demuestre cómo es". Arguyó que para ello es necesario "darse la mano", pero advirtió a PSdeG y BNG que deben "apretar lo justo". "Agradecemos todo lo que signifique consenso, pero estamos acostumbrados a que tenga una sola dirección", advirtió Ruiz Rivas, en alusión a la actitud del bipartito. Al respecto, el portavoz popular reprochó a Touriño que no hiciese la intervención de hoy "hace un tiempo" -"no estaríamos aquí", en una comisión de investigación, dijo-. También se alegró de que ahora todos apoyen a la CdC, pero recordó que los socios del bipartito presumían en el exterior de lo que "se avergonzaban" en Galicia. Además, aprovechó para aludir a que la Consellería de Cultura inició hoy una campaña publicitaria en prensa para "vender" un proyecto que primero el bipartito trató de "hundir". "Otros empezaron a soñar antes que ustedes, su problema es que siguen dormidos", concluyó.

Por su parte, el portavoz del BNG, Carlos Aymerich, advirtió a Ruiz Rivas de que "sabe que no todo estuvo bien", en alusión a la gestación y gestión de la CdC y le recordó que eso habrá que "reflejarlo en las conclusiones" que elaborará la comisión de investigación. Así, el nacionalista apeló a "mirar hacia adelante sabiendo que, ahora sí, hay un proyecto, que se se está desarrollando" por un Gobierno gallego que trabaja "coordinadamente".

El portavoz del PSdeG, Ismael Rego, recordó la etapa de "oscurantismo" de la gestión hecha por el PP y contrapuso que el actual Ejecutivo gallego "tiende la mano a todos", a gallegos y grupos parlamentarios, para "impulsar unas conclusiones" sobre la CdC que "pongan claridad" y permitan "romper" con anteriores formas de hacer política.

Nota de prensa remitida por el Gabinete de Comunicación de la Xunta de Galicia:

O máximo mandatario galego, Emilio Pérez Touriño, asegurou na quenda de peche da súa intervención perante a Comisión Parlamentaria de Investigación da Cidade da Cultura que o complexo do Gaiás “se nos presenta como unha oportunidade que temos que saber aproveitar”. Por iso, o xefe do Goberno galego fixo un chamamento á concordia e á unidade para acadar “un gran acordo social e político” que “nos axude a converter esta gran infraestrutura nun éxito para Galicia”.

Neste sentido, o presidente da Xunta asegurou que o proxecto “non naceu todo o ben que debería” pero, ao mesmo tempo, indicou que “estamos aínda a tempo de encarreiralo e iso é o que fixo e está a facer o Goberno galego desde a súa toma de posesión”.

Paralelamente, Touriño sostivo que a Comisión Parlamentaria “lle pon o punto e final a un tempo cargado de incertezas”. Así, sinalou que rematou “o tempo das indefinicións, da opacidade e das anomalías e chegou a hora de traballar todos xuntos, con rigor, transparencia e sentido a prol dun proxecto que non é dun ou doutro partido, senón do conxunto da sociedade”.

Por outra banda, o presidente da Xunta asegurou que a Cidade da Cultura terá un papel decisivo ao funcionar como nexo e ponte entre Galicia, Europa, Latinoamérica e o mundo lusófono. Neste sentido, estableceu un paralelismo co Camiño de Santiago ao sinalar que “Galicia entrou na historia do mundo a través do Camiño de Santiago. Foi unha das nacionalidades históricas que máis contribuíu á creación dunha inicial conciencia europea”. Por iso, agora o complexo do Gaiás intensificará esa función xa que “non hai probablemente ningún pobo no mundo tan capacitado como Galicia para desenvolver exitosamente unha función de nexo, de ponte entre Europa e Latinoamérica, unha ponte que se estende tamén aos países de lingua portuguesa”.

Touriño abondou tamén en que para a realización dese papel, de “produción e difusión cultural”, a Cidade da Cultura “é un excelente instrumento que pode abrir moitas outras portas”.

Outro dos papeis que desenvolverá o complexo do Gaiás, tal e como indicou Pérez Touriño, refírese a servir de estandarte da sociedade galega actual. “Galicia está cambiando e vai cambiar aínda máis”, indicou o presidente da Xunta porque “non se resigna a ser periferia”. “Queremos estar no centro dos fluxos culturais internacionais, nos grandes debates globais, na primeira liña da creación e da experimentación, plenamente incorporados á Sociedade do Coñecemento”, significou.

Xunto a iso, a Cidade da Cultura será, en verbas de Touriño, “un potente instrumento de internacionalización e dinamización interna, non só no ámbito cultural”. Neste sentido, axudará a que Galicia se internacionalice e se abra ao mundo posto que o complexo do Gaiás “pode constituír un notabilísimo instrumento de transformación social e de cambio cultural, de proxección internacional e de dinamización interior do país”.

Ademais, segundo asegurou o máximo mandatario galego, unha infraestrutura “tan potente como esta non esgota as súas potencialidades no estrito ámbito cultural” pois necesariamente “terá tamén importantes repercusións noutras áreas da actividade social”.

Para concluír, o presidente da Xunta asegurou que a Cidade da Cultura proporcionará maior confianza aos galegos posto que evidenciará que “Galicia tamén pode abordar con éxito un proxecto desta envergadura” como xa fixeron outras comunidades.

“O que necesitamos é unir esforzos, aparcar as pequenas diferenzas, adoptar actitudes construtivas e, sobre todo, ter confianza en nós mesmos”, considerou Touriño.